¡Hola queridos Veraniegos! ¿Cómo los está tratando el día? Estoy aquí con un nuevo post un poquito más personal. Sin embargo, quiero compartirlo con ustedes que me leen y que quizás sufren o conocen a alguien que lo padece de ansiedad.
Este tema para mí es importante porque la ansiedad me ha acompañado muchos años de mi vida y he tenido que lidiar con ella y tratar de superar cada etapa y situaciones en la que me pone.
El tema es muy extenso para mí, así que lo trataré en distintos post para que poco a poco vaya explicando de qué trata este padecimiento y cómo es vivir con ansiedad.
Voy a empezar explicandoles qué es la ansiedad.
La ansiedad es una anticipación involuntaria de un daño o desgracia futuros, que se acompaña de un sentimiento desagradable o de síntomas somáticos de tensión. El objetivo del daño anticipado puede ser interno o externo. Se trata de una señal de alerta que advierte sobre un peligro inminente y permite a la persona que adopte las medidas necesarias para enfrentarse a una amenaza.
Es decir, que la ansiedad provoca que el cuerpo reaccione de manera descontrolada ante la sensación de amenaza, no neceseriamente esta amenza tiene que ser real, en muchos de los casos es imaginaria pero tu cerebro cree que no es así, desenvocando en síntomas tan desagradables. Entre esos síntomas están:
- Temor a la muerte
- Sudoración
- Falta de aire
- Mareo
- Sensación de desmayo
- Palpitaciones
- Taquicardia
- Dolor de pecho
- Malestar estomacal
- Rígidez o dolor muscular
- Verborrea o quietud
- Sensación de confusión
- Sensación de vacío
- Torpeza
- Nerviosismo
La ansiedad puede presentarse en el momento menos oportuno, no importa si el ambiente sea seguro o no, simplemente aparece. En ocasiones, se vuelve más fuerte cuando te enfrentas a situaciones que te ponen nervioso o son tu punto débil como estar rodeado de personas, en lugares abiertos o cerrados, andando solo por la calle, lugares oscuros o iluminados...
Los síntomas pueden duran días o si estás en un ataque de pánico (del que hablaremos en otro post) duran como 20 minutos pero son los minutos más largos de tu vida.
Sufrir de ansiedad no es nada agradable pero en ocasiones nos enfrentamos a personas que no pueden entender qué se siente. Tampoco esperamos que comprendan pero al menos que den un poco de apoyo cuando no la pasas tan bien.
Nunca debe avergonzarnos confesar que padecemos de ansiedad. Tratar de ocultarla puede generar estrés y provocar que se altere más. Quizás no lo comprendan, algunas personas ven mal estar enfermo lo toman como sinónimo de ser una persona floja, desobligada y nada tiene que ver con eso.
La ansiedad es un tema serio para quien lo padece. Más adelante hablaré de mi situación personal, de qué hago al respecto, de ataques de pánico y cómo he sobrevivido a ellos.
¡Hasta pronto!
XO